Se denominan pilotes excavados, perforados o de extracción, los que en su ejecución la perforación se efectúa por extracción del terreno. Debido a esta forma de instalación, se suelen denominar también pilotes de sustitución.

Los pilotes perforados se hormigonan en obra, aunque en edificación se reduce su uso a pilotes de un diámetro menor al metro.

La excavación del terreno para ejecutar estos pilotes suele ser a percusión con cucharas de distintos tipos o trépanos. Sin embargo, también se perfora a rotación con distintos tipos de corona o cuchara a rotopercusión si los terrenos son duros, compactos o rocosos o mediante útiles helicoidales que se hincan con giro y se extraen sin él. Cada método de excavación influye de forma diferente en el terreno, lo cual modifica el comportamiento pilote-terreno.

Respecto a los pilotes hincados, los excavados presentan las siguientes ventajas:

Pueden obtenerse muestras del terreno mientras se realiza la excavación.

Pueden atravesarse con más facilidad estratos duros.

Los sistemas de perforación producen mucho menos ruido y vibraciones, con maquinaria generalmente más ligera y barata.

Se pueden alcanzar mayores profundidades.

Artículo creado con información de victoryepes.blogs.upv.es